Los cabezas de lista al
Congreso y al Senado por Izquierda
Unida – Los Verdes (IU-LV) en Guadalajara, José Ángel Morales y
Elena Loaisa respectivamente,
comparecían hoy ante los medios de comunicación, como hicieron hace unos días
para explicar sus propuestas en materia económica y de empleo, en este caso
para dar a conocer las propuestas para la regeneración democrática, para la
cultura y para la paz que se recogen en el programa electoral de dicha
formación.
Previamente la candidata al Senado, Elena
Loaisa ha mostrado la “solidaridad y el apoyo de Izquierda
Unida – Los Verdes con los trabajadores de ISOVER, en
movilización contra los despidos y el Expediente de Regulación que se ha puesto
en marcha por parte de dicha empresa, perteneciente al grupo Saint Gobain, que
a pesar de tener beneficios ha decidido reducir la
plantilla. Una vez más prevalece el interés empresarial, frente
al de los trabajadores”, ha dicho, y además ha recordado que “Izquierda
Unida incorpora en su programa la prohibición de llevar a cabo
expedientes de regulación en empresas que hayan obtenido beneficios y que a la
vista de los acontecimientos esta propuesta es hoy más necesaria que nunca”.
A
continuación se ha referido a las propuestas de Izquierda
Unida – Los Verdes en materia de Regeneración Democrática, “en
la construcción de una democracia participativa, que ponga a los ciudadanos en
el centro de la política, en el marco de
un Estado Social Federal, republicano y laico, que amplíe los marcos de libertad y participación y
garantice el bienestar colectivo en todos los aspectos: económico, social y
cultural”, ha dicho.
“Hay que
modificar la Ley
Electoral para que realmente la composición de las
instituciones refleje fielmente al conjunto de la ciudadanía y su pluralidad,
porque mientras no se produzca este cambio para que todos los votos tengan el
mismo valor existirá un déficit democrático. No acometer esta reforma es
potenciar y apostar por el bipartidismo”, afirma.
La candidata
considera necesario “el establecimiento de nuevos cauces de participación
ciudadana a todos los niveles: local, autonómico y estatal, como los presupuestos
participativos”, también ha abogado por la modificación de la iniciativa
legislativa popular “para agilizarla y favorecerla, sin limitar su ámbito de
actuación y reduciendo los plazos y número de firmas necesarias para llevarla a
cabo y garantizando la participación en su defensa a quienes la han porpuesto”.
Considera
necesario, asimismo, “introducir en la Constitución materias que requieran
obligatoriamente de la consulta popular para su reforma o aprobación, para que
no suceda lo ocurrido con la última reforma constitucional, pactada por los dos
partidos mayoritarios, que se ha realizado en quince días, que va a afectar a
temas esenciales para la vida de los ciudadanos, sin que se les haya
consultado”.
También ha
destacado las iniciativas de IU-LV para luchar contra la
corrupción. En este sentido considera necesario la adopción de
medidas para un comportamiento ético de los cargos públicos: “que tengan que
asumir los costes directos e indirectos causados por sus acciones delictivas,
la supresión de privilegios y limitación de los salarios, la eliminación de la
inmunidad en casos de corrupción, la imprescriptibilidad de los delitos de
corrupción, la aplicación de las medidas antitransfuguismo y ha propuesto la
revocabilidad de los cargos públicos en determinados casos que podrían iniciar
un 20% de los electores”.
La lucha contra la corrupción va ligada directamente
al desarrollo de los derechos democráticos de los ciudadanos, por eso “la
auténtica participación de la ciudadanía solo es posible si puede acceder en igualdad de condiciones a la información y
para ello es imprescindible la máxima transparencia en las instituciones
públicas, por eso IU-LV impulsará la
elaboración de una Ley de Acceso a la
Función Pública que considere el derecho de información como un
derecho fundamental que pueda ejercerse sin necesidad de justificar las
razones, que se pueda ejercer en todas
las entidades públicas, poderes del Estado y entidades privadas que
realicen funciones públicas”, ha afirmado la candidata.
Por su parte, el candidato
al Congreso, José Ángel Morales, ha manifestado que “el paso del tiempo ha
consolidado los valores más conservadores de la Transición como la monarquía, la impunidad del
Franquismo y los privilegios de la
Iglesia Católica y que las conquistas de la izquierda, como la
inclusión del derecho a la vivienda y al trabajo, son hoy papel mojado a las que nadie, salvo la izquierda
alternativa, les da la importancia que merecen y por eso consideramos necesario
que se pueda exigir el cumplimiento de estos derechos”. En este sentido subrayó
su apuesta por un nuevo proceso constituyente y forma parte de “nuestro proyecto de III República federal y
solidaria, con democracia participativa”, ha afirmado.
“La democracia se ha ido
vaciando de contenido. Cada vez más, las grandes decisiones las toman
organismos supranacionales que no son democráticos (FMI, Comisión europea,
Banco Mundial…). El sistema político español es ajeno a mucha gente por su
propio funcionamiento y porque somos ya muchos los que ni siquiera tuvimos
posibilidad de votar la Constitución porque sólo los que hoy tienen cincuenta o
más años pudieron votarla”, dice Morales.
También se ha referido a la
reivindicación de la
Memoria Histórica: “para mirar al futuro necesitamos tener memoria;
memoria democrática. Esto supone declarar nulo los juicios franquistas,
desarrollar un protocolo de exhumaciones con intervención pública y borrar los
nombres de los que se sublevaron contra la democracia del callejero. Y no
queremos que eso sea una opción, por eso, hay que modificar la Ley de Memoria
Histórica y así lo recogemos en nuestro programa”.
En relación con el laicismo
el candidato al Congreso ha afirmado que “muchos de los acuerdos que rigen con la
Iglesia Católica vienen del Franquismo, el Concordato es del
año 1953, y nosotros queremos abolirlos. Queremos ampliar el concepto de
Libertad religiosa a Libertad de conciencia, pues la conciencia puede ser
religiosa o no. Y queremos suprimir los privilegios de la
Iglesia Católica, que nos alejan de un Estado aconfesional”. “Y
esto pasa por eliminar la financiación pública, las exenciones fiscales y las
donaciones de suelo público. Que se recauden ellos sus fondos y no se lo haga
el Estado vía IRPF”.
“En un Estado aconfesional
no caben las ceremonias de Estado con simbología religiosa. Asimismo la
religión no debe formar parte del contenido de los programas educativos:
educación a las escuelas, catequesis a las Iglesias. La Enseñanza religiosa
debe quedar fuera del horario lectivo y no subvencionarse. Religión fuera de la
enseñanza financiada con fondos públicos; en la pública no, pero tampoco en la
concertada”, apostilla Morales.
“En Izquierda
Unida denunciamos que el gasto militar va en aumento. La OTAN,
y España dentro de ella, lo está aumentando. Con sólo un descenso del 1% del
gasto militar total se podría dotar económicamente la consecución de los
Objetivos de Desarrollo del Milenio. Tenemos muy claras cuáles son las
prioridades”, afirma.
Preguntado sobre lo que
opina del debate entre los candidatos del PSOE y PP que se celebrará esta noche
José Ángel Morales ha respondido que “no sabemos si van a discutir sobre los
1200 soldados extranjeros que van a llegar a Rota, el escudo de misiles, el
Pacto del Euro y todas las medidas que han acordado y han deteriorado nuestra
democracia y nuestras condiciones de vida. Son como el dúo Pimpinella discuten
cuando actúan, pero al salir del plató son hermanos”.
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